Un niño en Siena fue tratado por una neumonía grave y una infección parasitaria.

Un niño recién llegado a Italia e ingresado en el Hospital Le Scotte de Siena recibió tratamiento exitoso por una enfermedad pulmonar compleja agravada por la presencia de un parásito. El caso, gestionado mediante cirugía pediátrica, radiología intervencionista y cirugía torácica, requirió dos procedimientos coordinados y de alto riesgo.

Salvado de una neumonía complicada

El joven paciente había ingresado en la sala de pediatría durante la primavera por una neumonía complicada, que requirió una toracoscopia inicial para drenar un gran derrame pleural. Investigaciones posteriores, basadas en la hipótesis de una posible malformación congénita como causa subyacente, revelaron un posible secuestro pulmonar intralobar, una afección congénita poco frecuente. La situación se agravó por una infección causada por Echinococcus, un parásito asociado al contacto con animales que había ascendido al pulmón a través del sistema vascular de la malformación.

“Se realizó un procedimiento quirúrgico combinado, trabajando en dos quirófanos con dos intervenciones posteriores: se cerraron las arterias abdominales (embolización arterial preoperatoria) y, posteriormente, se extirpó la porción infectada del pulmón que contenía la malformación y el microorganismo en cuestión”, señalan los cirujanos.

El procedimiento se realizó con el paciente bajo anestesia general y ventilación selectiva, gracias al trabajo de todo el equipo de anestesia pediátrica. Tras despertar y un breve período de monitorización en las unidades de cuidados intensivos perioperatoria y general, el niño regresó a la planta de hospitalización. Se le inició entonces un tratamiento específico para la infección parasitaria, con el objetivo de prevenir complicaciones posteriores. «El resultado fue sin complicaciones, con buen control del dolor y una buena recuperación de su estado clínico general», concluye el director.