En Pozzi, una aldea de San Michele al Tagliamento, en la provincia de Venecia, los jubilados llevan casi tres semanas sin poder cobrar sus pensiones en efectivo. ¿El motivo? La caja fuerte de la oficina de correos local está rota. Una situación que, según el Cgil Veneto, está obligando a muchas personas mayores a endeudarse con los comerciantes para comprar artículos de primera necesidad.
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El caso fue planteado por Marco D'Auria, de la secretaría regional de Slc Cgil, quien denuncia una situación concreta y creciente de penurias para los residentes de la pequeña aldea veneciana. «La caja fuerte lleva 20 días fuera de servicio y las personas mayores que dependen del efectivo no pueden retirar sus pensiones», explica el sindicalista.
“Se están endeudando solo para comprar comida”, añade, “pidiendo ayuda a comerciantes o familias. Una situación inaceptable que debe resolverse de inmediato”.
Por el momento, Poste Italiane no ha publicado ninguna nota oficial sobre la avería ni ha indicado un plazo concreto para la reparación. No parece haberse preparado ninguna alternativa para compensar la falta de fondos: ni ventanillas móviles ni transferencias temporales de operaciones.
El malestar, por tanto, continúa sin perspectivas inmediatas de solución.
La población de Pozzi, compuesta principalmente por personas mayores, se encuentra entre las más vulnerables. De hecho, muchos ciudadanos no usan tarjetas ni herramientas digitales, y aún dependen del efectivo para sus gastos diarios.
“La imposibilidad de retirar la pensión genera dificultades tanto psicológicas como económicas”, denuncian los residentes a la CGIL.
El sindicato pide la intervención inmediata de Poste Italiane, tanto para la reparación de la caja fuerte como para la activación de medidas extraordinarias.
«Es impensable dejar a los pensionistas sin dinero durante casi un mes», insiste D’Auria. «Necesitamos soluciones temporales: una ventanilla móvil o la posibilidad de cobrar la pensión en una oficina cercana, con una comunicación clara con los ciudadanos».
El caso de la caja fuerte rota se inscribe en un panorama más amplio. De hecho, la provincia de Venecia ya se ve perjudicada por la progresiva reducción de oficinas de correos, especialmente en las zonas periféricas.
Según la Cgil, esta deficiencia estructural, combinada con servicios deficientes como el de Pozzi, agrava la marginación de los segmentos más débiles de la población, alimentando la penuria y la inseguridad económica.