La tragedia de los mineros de Buffelsfontein, obligados al canibalismo por la policía

La tragedia de los mineros de Buffelsfontein, obligados al canibalismo por la policía

Compartir

Entre finales de 2024 y principios de enero de 2025, en el corazón de la antigua mina de oro de Buffelsfontein, a unos 150 kilómetros de Johannesburgo, se produjo una tragedia que conmocionó a Sudáfrica y a la opinión pública mundial. Según los informes, las autoridades, en un intento de "expulsar" a los mineros ilegales que se habían negado a abandonar el sitio, cortaron el suministro de alimentos y agua, lo que provocó una emergencia humanitaria tan extrema que empujó a algunos supervivientes al canibalismo.

LEER OTRAS NOTICIAS DEL MUNDO

Fin de una pesadilla: 324 salvados y 78 muertos

A principios de enero de 2024, los equipos de rescate finalmente pusieron fin a un estancamiento de meses y sacaron a la superficie a 324 personas atrapadas bajo tierra. Sin embargo, la nota más dramática sigue siendo la recuperación de 78 cuerpos de mineros fallecidos, que probablemente murieron de hambre, deshidratación y, en algunos casos, víctimas de la violencia.

Dos supervivientes, actualmente acusados de minería ilegal y posesión de oro, contaron a un importante periódico británico lo indecible: para seguir con vida, algunos compañeros habían empezado a comer partes de sus cuerpos. “Le cortaron partes de piernas, brazos y costillas”, dijeron, describiendo una situación de absoluta desesperación.

https://twitter.com/SowetanLIVE/status/1878838165248892980

La operación “Vala Umgodi” y el asedio a la mina

La represión contra los mineros ilegales fue parte de la Operación “Vala Umgodi” (término zulú que significa “cerrar el agujero”), una iniciativa lanzada en diciembre de 2023 para luchar contra las bandas criminales que explotan a migrantes irregulares (los llamados zama zamas) en minas ahora abandonadas.

Según la policía, cortar el suministro de alimentos y agua habría sido la única manera de evitar tiroteos con bandas armadas atrincheradas en los túneles. Sin embargo, numerosos sindicatos y activistas de derechos humanos han criticado duramente esta elección, hablando de "asesinatos por inanición" y de una de las "manifestaciones de negligencia deliberada más horribles de la historia reciente".

Protestas y escándalo: la fuga del jefe

La tensión aumentó aún más cuando se difundió la noticia de que un presunto líder de una pandilla había sido rescatado ya en diciembre, con la supuesta complicidad de algunos policías corruptos. Este episodio alimentó sospechas sobre posibles acuerdos ilícitos entre la policía y delincuentes, provocando protestas en la comunidad local y entre las familias de los mineros.

Ian Cameron, un parlamentario sudafricano, pidió claridad: “Si la policía impidió que los mineros se fueran y efectivamente los dejó morir de hambre, se debe abrir una investigación seria. No se pueden tolerar ciertas complicidades".

Testimonios escalofriantes desde el subsuelo

Los voluntarios de rescate informaron de imágenes terribles: mineros demacrados, que parecían supervivientes de campos de concentración, fueron arrastrados en camillas o hacinados en pequeñas jaulas diseñadas para la mitad de sus efectivos. Uno de los rescatistas, un hombre llamado Mkwayi, dijo que algunos estaban tan débiles que ni siquiera podían mantenerse en pie.

“Es mentira que la gente no quería salir. Esas personas estaban desesperadas y necesitaban ayuda, se estaban muriendo”, dijo Mkwayi, “Nunca olvidaré la visión de estas personas por el resto de mi vida”.

El problema de las minas abandonadas en Sudáfrica

Sudáfrica se encuentra entre los principales países del mundo en extracción de oro y otros minerales. Sin embargo, las minas abandonadas, como la de Buffelsfontein, siguen siendo un terreno fértil para el tráfico ilícito, gestionado por bandas organizadas que explotan la desesperación de los inmigrantes ilegales.

Los llamados zama zamas (“aquellos que intentan sobrevivir”) son reclutados con la promesa de ingresos fáciles, pero a menudo terminan atrapados en condiciones de esclavitud. Muchos arriesgan sus vidas en túneles sin la protección adecuada, sujetos a deslizamientos de tierra, accidentes y malos tratos por parte de los jefes de las pandillas.


Síguenos también en Google News: haga clic aquí