Cirugía estética y determinación se encuentran en una historia que está circulando en la red. Emily James, una mujer trans de Kansas City, decidió emprender un viaje estético decididamente fuera de lo común: extirparse seis costillas para lograr una cintura más delgada. Pero la mayor sorpresa llega después de la cirugía.
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Emily gastó la friolera de 17.000 dólares en esta operación, una inversión que, según ella, le permitirá alcanzar el cuerpo de sus sueños. Pero su plan no termina ahí. De hecho, la mujer decidió transformar las costillas extraídas en un objeto muy particular: una corona. “Voy a hacer una corona con eso”, dijo Emily a Caters News. "Me dejaron quedarme con las costillas y originalmente tenía la intención de dárselas a mi mejor amigo".
La decisión de Emily desató un acalorado debate en las redes sociales. Mientras algunos admiran su originalidad y determinación, otros cuestionan la necesidad de una intervención tan invasiva. "En tres días me quitarán tres costillas de cada lado", anunció Emily en un vídeo preoperatorio. “Haré una barbacoa con Emily”, bromeó.
A pesar de las críticas, Emily está decidida a seguir adelante con su proyecto. “Pienso convertirlos en una corona”, reiteró. “Algunas personas me han dicho que los convertirían en un juguete para masticar o los hervirían para hacer caldo”, dijo Emily. "Personalmente, creo que mi carne tendría un sabor delicioso". Sin embargo, la mujer aclaró que no tiene intención de comerse sus costillas. "Comer carne humana puede provocar una gran cantidad de dolencias mortales", explicó.
Ante las críticas, Emily tiene una respuesta preparada: “Que me extirpen las costillas no cambia el hecho de que soy una chica trans amable y cariñosa”, explicó. "Es mi dinero, mi cuerpo y haré lo que quiera con él".